domingo, 26 de agosto de 2012

La talanquera


Los gustos deportivos de los venezolanos también han marcado su conducta política.

Gracias a la explotación petrolera fuimos invadidos, colonizados y transculturizados por los norteamericanos. Con los gringos llegó el beisbol, entró por los campos petroleros, lo veían jugar a través de las cercas de los campamentos yankees y se apoderó inmediatamente del gusto popular.  La pelota se extendió como una epidemia por todo el territorio nacional. ¿Las razones?, varias, entre ellas las económicas, con una sola pelota jugaban al menos dieciocho personas de un solo viaje. Lo que se necesitaba era un terreno baldío -un peladero de chivos-, una pelota y la muchachada de la urbanización, del barrio o del pueblo pasaba un día de diversión cargado de emociones, generador de destrezas sociales, fuente inagotable de futuras anécdotas y de entrañables recuerdos.

En el beisbol las normas eran claras, el mismo número de jugadores por equipo, unos bateaban otros cubrían, tres strikes, tres outs, 9 innings, los cambios eran ilimitados, pero el que se marchaba no volvía a entrar. Fácil y sencillo de entender. Quien salía -por un cambio pedido por el mismo jugador u ordenado por el equipo-, no podía incorporarse nuevamente al partido.

La postguerra trajo consigo oleadas de inmigrantes europeos -desarraigados, pobres, campesinos muchos ellos artesanos otros cuantos-, que en sus alforjas, entre sus pocas posesiones, trajeron algún viejo y desgastado balón de futbol. Los “musiúes” se agruparon en clubes y “hogares”, para conservar sus tradiciones pero al final se volvieron tan criollos como las arepas, el joropo o las hallacas y -muy a su pesar- sus hijos se hicieron venezolanos.

Esos muchachos ya no tan europeos, trasplantados algunos, nacidos aquí los más, contagiaron a los criollos la afición por el balompié. Y poco a poco el futbol si no superó al beisbol, al menos caló tanto en el gusto de nuestros compatriotas que paulatinamente se ha llegado a alcanzar ese raro fenómeno de identificación de la gente de un país con su selección que se conoce cariñosamente como “la vinotinto”.

Allí también las normas eran claras y en su arraigo también influyó la economía. Un balón permitía al menos que jugaran veintidós competidores. Nuevamente un ejido municipal, un solar ocioso, un balón y una chiquillada desocupada servían de ingredientes para la algarabía. Todos recordamos algún relato de aquella época, algún cuento que se ha teñido de epopeya y que evocamos gratamente cuando un grupo de ex condiscípulos se reúnen y cuentan sus fechorías.

En este deporte los cambios son limitados, y todo el mundo está enterado de que el que sale no vuelve a entrar. Así es el fútbol.

Los partidos políticos seguían como en el deporte normas, básicas, sencillas y el que se salía bien sea por su propio gusto  -por desacuerdos de forma o de fondo con otros militantes-, o quien era expulsado de las filas del partido no pensaba por honor, por decencia o sencillamente por no aguantar la mamadera de gallo, volver a la agrupación de la que se había marchado.

Así, Jesús Ángel Paz Galarraga y Luís Beltrán Prieto Figueroa se largaron de Acción Democrática y no volvieron a pasar por allí nunca más, prefirieron fundar el MEP y morir con las botas puestas. Alfredo Maneiro al escindirse del PCV funda el partido de la R disléxica (La Causa Radical) y no vuelve a mirar hacia donde estuviera el gallito rojo. Lo mismo sucede con Domingo Alberto Rangel o con José Manuel “Chema” Saher cuando deciden desprenderse de AD y fundar el MIR. Y más adelante en la historia política venezolana ocurre igual cuando Rafael Caldera salió de su propio partido, les hizo la cruz, les untó los santos óleos y fundó Convergencia, alias “el chiripero”.

El básquetbol trajo nuevas reglas y con ellas nuevos procederes políticos. Tal vez por lo trepidante de las acciones de este juego, o también influido por razones de economía, esta vez por los costos del terreno, este deporte citadino volvió locos a los párvulos que encerrados por las cuatro paredes de su apartamento, oprimidos por los edificios, enclaustrados en colegios sin patio, se vieron forzados a compartir un pequeñísimo espacio con los jugadores de voleibol, los practicantes de gimnasia, y los alumnos de educación física. Diez atletas, un balón y cambios indefinidos. En este deporte sus practicantes entran y salen de la cancha cuantas veces quieren o les ordena el entrenador y mientras no llegue a cinco faltas podrá andar y desandar el camino hacia la baca cuantas veces les dé la gana.

La arena política venezolana entonces con el básquet adquirió otras costumbres y se comenzó -decididamente- a ver el salto de talanquera. Teodoro Petkoff y Pompeyo Márquez pasan del PCV a AD, de nuevo al PCV, luego al MIR, al MAS, a Convergencia, al MAS otra vez, a la Coordinadora Democrática, a la MUD y quien sabe cuántos cambios más harán antes de que la parca los llame a las duchas.

Douglas Bravo veleidoso brincó del PCV al PRV, al FALN, a Bandera Roja a la Coordinadora Democrática, a la MUD. Gabriel Puerta Aponte voluble como es el saltó del MIR a las FALN, al MDP, a Bandera Roja, al MVR, a Un Sólo Pueblo, a la Coordinadora Democrática, a la MUD. El denominador común: todos terminan sentados sonrientes al lado de sus torturadores, muy próximos de sus carceleros.

No extraña entonces que con ese ejemplo que dan los mayorcitos, las nuevas generaciones de políticos vernáculos vean que como en el basquetbol en la política uno puede entrar y salir del juego cuantas veces quiera.

Así, Didalco Bolívar como una veleta cambia del MAS al PPT, a Podemos, al MVR, al PSUV, al PPT otra vez, a la Coordinadora Democrática, a hacerle ojitos nuevamente a Chávez. Ismael García siempre inestable saltó del MAS a Podemos, al PPT, al MVR, al Frente Nacional Amplio FNP, al PSUV, a la AVP, a la Coordinadora democrática a la MUD. José Gregorio “el gato” Briceño pasó tornadizo de AD al Movimiento Independiente Ganamos Todos fundado por el mismo, al MVR, al PSUV, a AD otra vez, a la Coordinadora Democrática a la MUD. Henry Falcón frívolo e inconsecuente del MAS pasó al PPT, al MVR200, al MVR, al PPT, al PSUV, de nuevo al PPT, al Frente Progresista FP, a Avanzada Progresista AP, a Primero Justicia, al PSUV otra vez, a UNT, a la MUD.

Por eso que David De Lima experto en el salto de talanquera salga con una nueva traición, esta vez y por fortuna no contra el proceso sino contra su propio candidato Enrique Capriles, no debe generar sorpresa y mucho menos se le debe conferir el protagonismo que se le está dando. El sabe por qué lo hace, tiene puesta la mira en la gobernación del estado Monagas y sabe que Capriles está derrotado. Trata de ganar indulgencias para que Chávez le levante la mano. Por eso ese movimiento destemplado, tan fuera de tiempo, como si pareciera espontáneo, improvisado.

Luis Miquelena, Eduardo Manit, Luís Felipe Acosta Carlés, Liborio Guarulla, Herman Escarrá, Vladimir Villegas, Gilmer Viloria, “El Gato” Briceño, Didalco Bolívar, Ismael García, Henry Falcón y una larga lista que escapa a la fragilidad de la memoria han convertido la política en algo más interesante que una carrera de tres mil metros con vallas, puesto que esta se corre en un solo y aburrido sentido, mientras que estos émulos de Judas Iscariote dependiendo de cómo amanezca el día saltan las vallas en una dirección o en sentido contrario.

Al menos estos saltadores de talanquera han tenido la decencia de haberse apartado después de haber traicionado. Pero desafortunadamente dentro, en las filas revolucionarias, es mucho el que como Pedro estará dispuesto -antes de que cante tres veces el gallo del imperialismo-, a traicionar al líder de este proceso de cambios revolucionarios y permanecen agazapados.

domingo, 19 de agosto de 2012

El Tour de la Suapara 2012


“¡Como te quiero Venezuela!...”

“Querido pueblo de San Felixpe,… vengo llegando de Coquivacoa… no, de Buchivacoa… también en el estado Yaritagua… y me doy cuenta de lo grande que es este estado. Pasamos por Ciudad Bolivia y allí me dijeron que comiera cabeza de suapara… y de una el candidato de lo viejo se burló de mi… pero lo que no sabe él además de que candidato gordo es porque no camina… es que si uno come cabeza de sapoara se casa con una guyanesa… pero con mis gustos “cul… linarios” si como la cabeza y otras partes de un pez llamado suapara… que es otro tipo de pescado… es capaz de que me enrede con un guyanés je je!”. “¡Como te quiero Venezuela!”.

“En esta intensa campaña hemos pasado por el estado Barquisimeto en donde Henry Falsón me dio a probar empanadas de esas que tienen carne por dentro…” “y ahora que nombro  Henry… me acuerdo que fui a entregar en donación unos arreos de chivos a las comunidades de Praguaná y pedí que me llevaran al pueblito de Marica -no sé por qué me gusta tanto ese pueblo-, que iba a ofrecer créditos para la compra de burros… pero en lo que comencé a hablar y dije ‘Yo ya sé que es lo que quieren las mariquitas y mariquitos… ¡Chocolate Nuevo!... se me acercó un coriano mal encarado y con cara de arrecho y me dijo...’ ‘¡Candidato, este pueblo se llama Miraca no Marica!’… ahí entendí por qué nadie se emocionó con mis ofrecimientos… Lo cierto es que ese día yo pedí coro-coro porque estando en el estado Coro… y me dieron tarkarí de chivo”

“Mis asesores me dicen: Capriles vamos a tener que desarrollar ‘Inteligencia Artificial’ para ayudarte… y yo les pregunto ¿Para qué?... ¡si con la mía basta!... Entonces Barboza y Ramos Allup dicen entre dientes: ¡Si Luís!... Pero yo no los entiendo… no los comprendo, ¿Será sarcasmo?... Bueno, tendré que buscar uno de esos telescopios que usan en los submarinos para estudiarle el pensamiento a los microbios esos de la vieja política…”

“Nos acusan de querer eliminar a las misiones… y eso es mentira… lo que queremos es redimensionarlas… Es más, vamos a crear otras… por lo menos, la ‘Misión Santander’ y pondremos a dirigirla a Oswaldo Alvares Paz… También crearemos el Centro Nacional de Estudios Superiores de la Frontera ‘Álvaro Uribe Vélez’ (CENAESFAURVE)… dedicado a consolidar las relaciones amistosas y cordiales que se tuvieron con el anterior gobierno de la hermana república de Colombia… y para dirigirlo quién mejor que su propio inspirador… el para nosotros aún presidente, amigo y consejero… Álvaro Uribe Vélez, a quien nosotros cordialmente le decimos 'Varito'”

“No es cierto de lo que se nos acusa… tildándonos de ser el ‘candidato media’… porque y qué cada vez que abrimos la boca es para meter la pata… esa es parte de la campaña sucia que el comando del Presidente usa en nuestra contra… lo que nosotros hemos estado haciendo hasta ahora es ahorrar nuestra brillantez para usarla cuando sea yo presidente… Lo que si soy yo es el candidato de Los Medios…”

“Se burlaron de mi porque dije que en Venezuela había 4 millones de venezolanos que se acostaban sin dormir… y de una vez salió el sabihondo del candidato de lo viejo a corregirme argumentando que gracias a sus políticas con MERCAL, PDVAL, Casas de Alimentación, Comedores Populares, Simoncitos, PAE, etc, ahora los venezolanos se alimentaban mejor… Y ahora soy yo el que río… ¿Quién les dijo a ustedes que yo me refería a venezolanos que se acostaran sin comer?... Yo sé que ustedes están bien alimentados… ¡Yo me refería a los más de 4 millones de venezolanos que se acuestan sin poder dormir!… ¿Si no, por qué entonces se vende tanto Tafil, Lexotanil y whisky en Venezuela?... ¿Ahhh… ahora quién es el caído de la mata?...”

“También se nos imputa el hecho de ser fascistas, racistas, de que desprecio a los pobres, que no quiero al pueblo y no sé cuantas cosas más por haber militado -orgullosamente-, en Tradición Familia y Propiedad… y déjenme decirles que todo eso es falso… si hasta en diciembre… después que se va Santa, yo dejo que entre el niñito ese indigente que nació en un establo… y en enero dejo que pasen los Reyes Magos a mi casa… claro el negrito se queda afuera… Pero es que si él no permanece afuera… ¿Quién cuida los camellos?... Y ustedes saben cómo está la inseguridad en este país… por eso es que lo primero que haré al llegar a la presidencia será… ¡Expropiar la delincuencia!”

“Y asesorados por ‘Varito’ dejaremos de ser un país monoproductor… vendedor de materias primas sin provecho… ¡Y pasaremos a sembrar el petróleo!“… Retomaremos la iniciativa que por culpa de este gobierno quedó olvidada… Traeremos nuevamente los 116 campesinos que teníamos albergados en la finca Daktari para que les enseñen a los nuestros el cultivo de plantas medicinales y ornamentales como lo son la amapola, la coca y el cannabis… y con ayuda de nuestros empresarios le daremos valor agregado a esos cultivos procesándola en Venezuela para apuntarnos como exportadores en el mercado internacional con uno de los productos de más alto consumo en nuestro país aliado, los Estados Unidos… ¡Eso si será un batacazo!”

“Se los digo compatriotas Sanfelicianos… habitantes de mi Venezuela… ¡Con Capriles se vive mejor!... Muchas gracias… ¡Cómo te quiero Venezuela!”

jueves, 16 de agosto de 2012

Me faltó tiempo…

El estigma de Santander pende sobre la nación neogranadina. La sombra de la oligarquía más rancia de toda la olla del Caribe oscurece la franqueza y simpatía del pueblo llano colombiano. Sufre la hermana república la esclavitud impuesta por las castas. Y aunque el presidente Juan Manuel Santos es el último eslabón de la cadena, la anterior argolla, esa pieza engastada en excremento resultó ser la joya de la corona de la traición.

Álvaro Uribe Vélez ex presidente del hermano país tiene un empepe, un pase de corriente con el Presidente Chávez. Un empeño personal por desacreditarlo, por enlodar su gestión y su imagen para evitar que presidente de los venezolanos le quite el protagonismo.

Indiscutiblemente el Presidente Chávez es un líder latinoamericano consolidado, su accionar político, sus muestras de solidaridad internacional, su defensa de las ideologías progresistas, el afecto sincero que expresa por  los más humildes y menesterosos ensombrece la mezquina y rastrera conducta de Uribe Vélez.

Para la mayoría de los colombianos era un secreto la cercanía de Álvaro Uribe Vélez con los capos del Cartel de Medellín por eso lo llevaron a ocupar la presidencia de esa nación. Con esa cara de monaguillo cachaco engañó y sigue engatusando a una gran cantidad de incautos. Pablo Correa Arroyave, Gonzalo Rodríguez Gacha, Fabio Ochoa, Pablo Escobar Gaviria y otros cuantos narcos, asesinos y delincuentes de alta peligrosidad se encuentran entre los nombres de los amigos, financistas y protectores de Álvaro Uribe Vélez a lo largo de su carrera política.

“Tenía tres opciones: Hacer las denuncias, quedarme callado y la otra opción era un operativo militar en Venezuela… Me faltó tiempo” o algo parecido acaba de declarar Álvaro Uribe frente a un grupo de estudiantes de la Universidad Autónoma Latinoamericana en Medellín y casi de inmediato a este lado de la frontera, compatriotas venezolanos le aplaudieron la bravuconada. Oswaldo Álvarez Paz exprecandidato opositor, miembro de la mal llamada “Mesa de la Unidad Democrática” e integrante del comando de campaña del candidato Enrique Capriles Radonski lo justificó a viva voz.

A dos años y medio de haber abandonado la casa de Nariño le ha faltado tiempo a Uribe Vélez para ganarse la simpatía del gobierno norteamericano…

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para arruinarle la vida a cientos de miles de colombianos desplazados por la violencia desatada por los paramilitares.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para abrirle las puertas de Colombia a miles de mercenarios israelíes, agentes y soldados norteamericanos, a “contratistas” gringos y británicos.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para rociar a media Colombia con un diluvio perpetuo de glifosato, sustancia altamente toxica que le vendían sus amigotes de Monsanto, ignorando las graves consecuencias ecológicas y humanas que como secuela de su uso indiscriminado le traerán esos químicos al pueblo neogranadino.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para ordenar y cometer más asesinatos… el Mono Jojoy, Alfonso Cano, Raúl Reyes, Julián Conrado son algunos de los nombres que le deben retumbar en la conciencia a ese señor cada vez que apoya la cabeza sobre su almohada.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para instalar otras bases militares norteamericanas empañando la integridad territorial de Colombia y comprometiendo la paz y el equilibrio regional suramericano.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para desconocer y apartar a Piedad Córdoba de su actividad de mediadora encaminada a lograr la liberación de las personas retenidas por la guerrilla colombiana y la paz verdadera para el pueblo colombiano.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para traicionar la confianza depositada por el Presidente Chávez quien en su Papel de facilitador del proceso de paz quiso hacer lo debido y lo mantuvo informado de sus acciones y conversaciones con los cabecillas revolucionarios.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para aceptar y cumplir las órdenes que le imponían desde Washington.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para hollar el suelo de otras naciones violentando las normas de buena vecindad entrando como Pedro por su casa en 2005 hasta Caracas a “capturar” a Rodrigo Granda, o invadiendo militarmente en 2008 a Ecuador y bombardeando cobardemente en Angostura sector selvático fronterizo con Colombia a la población de Santa Rosa de Yanamarú.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para impulsar a su hermano Santiago Uribe Vélez, a sus primos Mario Uribe, Juan Diego y Carlos Alberto Vélez Ochoa para que organizaran actividades relacionadas con el narcotráfico, con la creación de los escuadrones de la muerte y con la ejecución de miles de asesinatos.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para crear otros fosos de la muerte para llenar esas fosas comunes con los cuerpos de miles de inocentes neogranadinos.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para entregarse de pies y rabos a los brazos de George Walker Bush.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para sobrepasar el puesto número 82 entre la lista de los narcotraficantes más buscados por sus amigos los norteamericanos.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para declararle la guerra a muerte a la paz para el pueblo colombiano.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para por intermedio Jorge Noguera Cotes -exdirector del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS)-, organizar la parapolítica neogranadina y posterior al proceso de desmovilización firmar el Pacto de Ralito.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para salvarles el pellejo a su cuñada Dolly Cifuentes Villa y a su sobrina Ana María Uribe Cifuentes detenidas por sus vinculaciones familiares con el narcotráfico y con el Cartel de Sinaloa.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para continuar el genocidio por intermedio de los asesinos de las Autodefensas Unidas de Colombia que el mismo instituyó como su brazo armado.

Le faltó tiempo a Álvaro Uribe para reunirse con Leopoldo López a ofrecerle la panacea de la seguridad ciudadana: organizar razzias en las barriadas pobres de todas las grandes ciudades para acabar selectivamente con la población que le resultare “incomoda” al gobernante aconsejado.

Le ha faltado tiempo a Álvaro Uribe para asesorar al candidato opositor Enrique Capriles Radonski.

En verdad lo que le ha faltado son bolas a Álvaro Uribe Vélez para -en las ocasiones en las que ha tenido en frente al Presidente Chávez-, decirle las cosas que a la distancia y a través de los micrófonos se atreve a pronunciar y que son dolorosas infamias.

sábado, 11 de agosto de 2012

¿Y si el 7 de octubre las cosas no salieran como deberían salir…?

Al menos debería resultar preocupante para el más distraído de los observadores, la audaz hilaridad con la que se está tomando la mayoría del pueblo venezolano los resultados de las últimas encuestas.


Siguiendo aleatoriamente los noticieros, programas de opinión, en la televisión o la radio, los diarios o revistas, de tendencia opositora o del Sistema Nacional de Medios, pareciera que el único que le está echando bolas a la campaña electoral es el propio candidato, el Presidente Chávez, y mientras los demás personeros del gobierno con tonito sobrado declaran que tranquilos, que la vaina está ganada.

Pues aunque esas mediciones den ganador por amplio margen al Presidente, no deberíamos descuidarnos, pues la oposición venezolana mientras tanto juega a confundir a la gran masa de indecisos -esos que todavía pululan calladitos, soterrados, hechos los paisas al lado de cada grupo que se forma para hablar de política- y les ofrecen el sueño americano, el mismo que desde chiquitos nos metieron hasta en los genes a través de los enlatados gringos. La casota de jardín verdecito con la grama recién cortada, los niños jugando despreocupados, la calle limpiecita, los dos carrazos estacionados, los vecinos simpáticos llevándote alguna vianda para darte la bienvenida, son imágenes difíciles de vencer al ver la realidad que a nuestro alrededor se construyó a la sombra del petróleo.  

Como en la fábula de Esopo la liebre confiada al reaccionar se da cuenta que la tortuga está cruzando la meta. Y nosotros dolorosamente el 8 de octubre nos podríamos despertar con esto:

¡Señoras y señores, damas y caballeros, estamos felices!, ¡Tenemos nuevo presidente!, ¡La era de oprobio ha terminado!, tiene la palabra el nuevo presidente electo de la República Bolivariana de Venezuela… ¡Enrique Capriles Radonski!: ( se oyen aplausos y vítores al fondo)

“¡Cómo te quiero Venezuela!...” (silencio prolongado)…
(y con el mismo mandibuleo y con similar tono de voz de Erika tipo 11) “Lo primero que vamos a hacer en mi gobierno es quitarle ese odioso nombre de Bolivariana a nuestra Venezuela… ¡Cómo te quiero Venezuela!” (cayado y con las dos manos sudorosas ahorcando el micrófono)… “A mí me parece más bonito Estados Unidos de Venezuela…” (otro silencio interminable)…

“Recuerdo cuando estaba chiquito, allá en el Este del Este,  bueno ya me decían ‘el flaquito’ y no como al otro señor que le decían Tribilín…” (mutismo dilatado)… “¡Tribilín… no Gooffy… je je!”

“Para esa época yo jugaba ‘Quemao’ en el cole… (silencio incomodo)… casi era campeón je je… recuerdo que usábamos leggins azules debajo de short de educación física… je je… una de las muchachas que trabajaban en la casa les decía lycras je je… también jugábamos ‘Queto’… ¿Te acuerdas Leopoldo?... (pausa Infinita)… qué tiempos aquellos… Ya para esa época no usábamos desodorante… como los europeos… porque nosotros veníamos de Europa… y además el Padre Morant que era español y del Opus Dey nos decía que con agua y esponja bastaba… (prolongado silencio)…”

“Esa era la época de TFP, cuando nos rapábamos la cabeza y me tatué en la nalga derecha una esvástica… Julio Borges y yo estábamos en los Boy scout y salíamos de campamento a las cuevas de El Cafetal… ¿te acuerdas Julio?...” (sepulcral y gélida mudez que hace más patente el carraspeo que se echa Barboza)

“La segunda decisión que tomaremos será devolver a todos los cubanos a su país!... (pausa)… ¡Aquí hay Chocolate Nuevo!... y traeremos entrenadores norteamericanos… catires, musculosos, como aquel bartender que conocí en el crucero por el Mediterráneo que  me regalaron los viejos cuando cumplí los quince… bueno, qué tiempos aquellos je je… volviendo al tema… ¡No más petróleo para Cuba!...” (silencio pesado, denso)…

“Toda nuestra Venezuela está mal… quien diga lo contrario, tiene tiempo sin salir del San Ignacio, del Tolón o del Sambil… je je…” (ya ustedes saben… otro silencio…) por cierto, recuerdo una vez que saliendo del San Ignacio con papá le pedí que me llevara al Mc Donald’s que está allí cerca… (silencio mirando hacia el cielo) y entrando al Auto Mc vi por la ventanilla al supervisor con su camisa azul de rayitas y su corbata, mandando a los de la caja y dije resuelto: “¡Papi cuando sea grande quiero ser presidente!”… y mi papá sonrió y me respondió: ‘¡Hijo no te preocupes… yo te compro esa vaina!… ¡Pero no se lo digas a nadie, que parezca que tú te lo ganaste!’…”

“En aquella época vendía los muñequitos de Pokemón repetidos a mis amiguitos… (nuevo silencio) había una canción de Locomía… ‘Voy cruzando las esquinas, arañando libertad/Dime, Norte ¿dónde estás?/Voy desnudo cara al viento, intentado adivinar/por qué no te he dejado... de buscar/Siempre he sido pasajero, no soy de ningún lugar/Viajo por mis sueños dónde...’ ¿la recuerdan?...”

“¿No hay Lipton por allí?, ¡Una botellita de Eviant por favor!... recojan esos papelitos por favor… y me los colocan en ese recipiente que parece un pipote… pero no es, no crean que las voy a botar…”

¡Entonces… no más petróleo para Cuba!... (se encoge de hombros y mira al infinito) ¡Tenemos que dejar de regalar nuestras riquezas… de dilapidar nuestros recursos… tenemos la gasolina más barata del mundo... (otra vez se queda callado, cataléptico…) en vez de hacer negocio con los Estados Unidos… por eso… ¡No más petróleo regalado!... ¡Vamos a aumentar el precio de la gasolina!...”

“Como dice la canción de Black eyed peas… ‘I gotta feeling that tonight's gonna be a good night/that tonight's gonna be a good night/that tonight's gonna be a good good night’…” (callado… callado… callado…)

“¡No más Locatel ni Farmatodo!… ¡Ahora tendremos Wallgreens!… ¡No más Acetaminofen de ese nacional que no hace nada… Ahora tendremos Tylenol!... ¡No más Milanta… ahora tomaremos Peptobismol!... y como dice Justin Beiber ‘If I was your boyfriend, never let you go/Keep you on my arm girl, you’d never be alone/I can be a gentleman, anything you want /f I was your boyfriend, I’d never let you go, I’d never let you go’…” (patético mutismo)

“Este será el gobierno de lo nuevo… (shhhhh) Vamos a cambiar ese feo rojo que se convirtió en uniforme de los venezolanos… (otra vez pesada sordina)… y para eso contrataremos a Margarita Zingg… y las benditas chaquetas tricolores las cambiaremos por unas negras con siete estrellas diseñadas por Titina Penzini… eso si será Glamour y buen vivir… (ya ustedes saben… silencio)… ¡Dejaremos atrás la era de los tukkis bolivarianos para siempre…! ”

“Ya no más la vulgar morrocoya de Rosinés caminanado por los pasillos de Miraflores… ahora el palacio presidencial tendrá de mascota a un cuchi golden retriver como en la Casa Blanca… ¡Ah… y también una perrita chihua beauty como la de Paris Hilton para vestirla y llevarla a la Asamblea Nacional a la toma de posesión!... ¡a ver cómo reaccionan los chavistas ordinarios esos…! (un nuevo… silencio) ¡Si va!”

“¡Este si será el cambio full marica!... A todos esos niches bakalas chavistas los dejaremos outlet!... A Iris Varela -¡que tipa tan intensa!- la cambiaremos por Delsa Solorzano y a Cilia Flores por Diosa Canales -esa si es cool-, a Nicolás Maduro por Marquina y a Diosdado por Ramos Allup. A Freddy Bernal por Ocariz para que no extrañemos el tonito de su voz y a Robert Serra lo cambiaremos por Yon Goicochea!”… (Calladito calladito que es como se ve más bonito)… De ministro de educación Superior pondremos a Ricardo Sánchez y de educación Inferior a Alicia Machado… De ministro de alimentación a Julio Borges… bueno y así o sea…”

“¡Que tripa… gané!... ¡No me lo creo ni yo mismo, pero GANÉ!... ¡Ahora mando yo así que no quiero ningún comentario de esos tipo nulo de los que hace Ramos Allup!... Ah por cierto, él nos dijo a los de Primero lechuguinos, petimetres y maripositas… ¡así que me lo ponen preso! Porque yo soy el mayor empleador, el Boos pues… que fino je je!

“Recuerdo que una vez me cantaba mi chofer una noche andando sin rumbo por la cota mil: ‘Strangers in the night/Exchanging glances/Wond'ring in the night/What were the chances/We'd be sharing love/Before the night was through…’ y yo le contestaba con el mismo Frank Sinatra ‘Strangers in the night/Exchanging glances/Wond'ring in the night/What were the chances/We'd be sharing love/Before the night was through…’ te acuerdas… Primero me criticaban por que no tenía nada en la cabeza y cuando decidí ponerme la gorra tricolor comenzó el CNE a fastidiar… ¡Qué intensa es esa señora Tibisay!... Les prometo que no voy a gobernar por twitter como hacía el candidato del pasado y para no parecerme al pasado, lo haré por facebook!...”

¡No voy a revelar más nada de mi original programa de gobierno… ¡Ni pendiente!… mejor me iré demasiado… a comerme una empanada de esas de las que tienen carne adentro… ¡Cómo te quiero Venezuela!”

sábado, 4 de agosto de 2012

Yo soy uno de esos 4 millones de venezolanos que se acuestan sin comer

¡Búrlense si quieren! Yo lo sé, ustedes los chavistas sólo creen lo que les diga "el dictador de Miraflores", ese sátrapa sabanero que gobierna por twitter.
Yo sé que nadie le cree a nuestro candidato, pero ese descreimiento es el resultado de la manipulación maliciosa con que la KGB rusa y el G2 cubano les presentan las noticias a las hordas chavistas de resentidos y tierruos.
Aquí quien manda realmente es Fidel Castro y ese señor tiene años ocultándole a su pueblo que se está muriendo sin poder disfrutar de la libertad que a lo lejos, allá en Miami, a tan sólo 90 millas les muestran -nos enseñan-, los Estados Unidos. ¿Y cómo? ofreciéndoles como un trapo rojo el cuento ese de salud, educación, autodeterminación y dignidad, como si con eso uno pudiera entrar a un Mall y comprar.
Pero bueno, nuestro próximo emperador Enrique XIII -verdadero descendientes de reyes y por allá lejos, de refilón, en 8vo grado, de ese mestizo patilluo que mostró el tirano por supuesto en cadena nacional con el cuento de que es nuestro libertador…como si nosotros no supiéramos que los únicos que nos van a venir a liberar son los marines norteamericanos-, dio a conocer la cifra exacta de los venezolanos que nos acostamos sin dormir… digo sin comer y obviamente el régimen con el cinismo que lo caracteriza lo agarró de mamadera de gallo.
¡Es cierto, cuatro millones de venezolanos nos acostamos sin comer! Esto producto de las políticas desastrosas de esta dictadura Castrocomunistalulistacristinistamujiquistacorreistaevomoralista.
¿Cómo piensan ustedes los chavistas en comer cuando el desastre se nos viene encima?, ¿Es qué acaso sólo nosotros la gente pensante de “nuestra Venezuela” nos damos cuenta del peligro que corremos?
Este régimen nos pone a correr por todos lados buscando los alimentos hechos por nuestros empresarios que, serán carísimos y malos pero son hechos por los nuestros y lo que encontramos son tremendos pollos brasileños, exquisitas puntas uruguayas, excelentes cortes argentinos, ¡No, nos negamos a comprar esas maravillas! Y por ahí comienza nuestro ayuno.
Esta hambruna que ocasiona el déspota de Sabaneta, es compartida por los cuatro millones de compatriotas que nos acompañamos en cada jornada de bailoterapia organizada por nuestros líderes para tumbar al gobierno desde el paro petrolero de 2003 “¡Cómo te quiero Venezuela!”. Entonces si estamos pegando brinquitos en lycras…¿En qué momento vamos a pensar en cocinar?
No nos queremos parecer a esos marginales gordos y contentos que muestran en VTV a cada rato, en cada una de las caravanas con que el autócrata trata de engañarnos para que pensemos que ellos, que ustedes son muchos. Yo sé que esto lo van a leer exclusivamente ustedes los chavistas pero les digo algo, piensen en “nuestra Venezuela”e imagínenla como el paraíso en que la convertiría nuestro chocolate nuevo: Un Sambil en cada pueblo, una plaza Altamira en cada ciudad, para cada parroquia un Monseñor Porras, para cada Iglesia un padre Ugalde. Para cada traición un Ismael, un “gato”. Para cada estado un “pollo” o un Henry Falsón.
Mientras el tirano y sus conmilitones regalan los alimentos en las casa de alimentación nosotros forjaremos documentos militares para que esos tipos de uniforme a los que hace no mucho tiempo atrás les lanzábamos pantaletas y gallinas en las puertas de los cuarteles nos acompañen en nuestras arrecheras y voluntariamente dejen de comer. Por eso tenemos un candidato que le decimos “el flaquito”,“porque candidato gordo… es porque no camina”.
No nos gusta eso de Comandante-presidente, nuestro trato hacia Enrique -antes de que se amotine-, va a ser de Emperador-presidente, pues él es el único que, con el espíritu norteamericano que nos caracteriza, a tratado de anexionar nuevos países a “nuestra Venezuela” asediando y asaltando embajadas.
Aunque Enrique “ya no nos acompañe, porque sentimos que ni a ustedes ni a nosotros nos ha acompañado” como dijo nuestro prócer Alberto Federico, y se haya comido una empanada de esas que tiene carne por dentro nosotros nos mantendremos firmes en alcanzar nuestra meta de acostarnos sin comer… aunque en la noche algunos se atraganten de cachitos como nuestros muchachos manitos blancas. Y si no fuera tan marginal diríamos que nuestra meta es alcanzar la esbeltez de los habitantes de Biafra, pero nos contentamos con llegar a lucir las carnes o su ausencia de las modelos de La Cibeles.
Y cuando por inanición decido romper el ayuno resulta que las últimas latas de sardina que quedaban en toda Venezuela las compró Julio Borges y se las llevó para la Asamblea Nacional a no sé qué demostración.