lunes, 30 de marzo de 2009

Balada de Manuel Rosales

Respuesta con ritmo de Rap a la canción del grupo canadiense ARKELLS
Desde el centro de la Monumental de La Chinita, con un despliegue de sonido y efectos especiales, el espectáculo ya está montado.

Las cámaras luchan por mostrar en las pantallas gigantes instaladas en la plaza, las imágenes más favorables para que los escasos fanáticos presentes en el acto, ataviados con las inconfundibles franelas amarillas de Primero Justicia, las verde agonizante de COPEY y las proyankees azulblanquirojas de Un Nuevo Tiempo, se animen a sí mismos al verse proyectados meneando las caderas y moviendo sus cabellos, coreando las canciones de su ídolo que ya, de tanto escucharlas, se saben de memoria.

Con el martilleo incesante de los platillos cerrándose, el tambor retumbando y el bajo completando los acordes básicos del ritmo, entre una nube de humo y con el resplandor de los grandes reflectores encendidos por detrás, asciende desde el piso una silueta impresionante que en actitud de conquistador, proyecta su imagen agigantada mientras la gente explota en gritos y se cierra una ovación.

El MC (Maestro de ceremonias) anuncia por los altoparlantes con una voz que retumba:
Ladies and Gentlemens… with you… Manuellll… Rosaaaaaleeesssss!

El alarido que resuena es impresionante. Las muchachas histéricas gritan sin cesar con todas sus fuerzas y pulmones. Mientras, continúan los acordes y, por el sabio empleo de la iluminación, se va haciendo cada vez más reconocible la figura del personaje que de pie en el centro del escenario ha comenzado a develarse.

Cubierto todavía su rostro por la visera de la gorra que lleva de medio lado, se aprecia sin embargo el perfil inconfundible de una nariz un tanto deformada por los múltiples intentos de borrar con escalpelo los orígenes negroides de las facciones del cantante.

Vestimentas típicas del Bronx, Queens o Brooklyn pero compradas en el mercado de las pulgas, regateándoles a las guajiras hasta el último centavo, completan el atuendo rapero del intérprete.

Manuel anima a sus fanáticos. Con el micrófono inalámbrico empuñado en su derecha, eleva sin embargo los brazos, aplaudiendo por sobre su cabeza con amplios movimientos de brazos batientes que recuerdan en parte la figura mítica de un precursor del género, el popular CAP Dog tantas veces exhumado.

Se inicia el espectáculo y el repertorio comienza entonando:

Si me apresan y me encanan
Ya no hay nada que temer
La justicia maracucha
Más que ciega, hecha la loca
Lo que quiere resolver
Es como hacer para que crezca
Su bolsillo sin perder
La compostura y presencia
Que delatan inocencia
Y que hacen aparecer
Al lobo que llevan dentro
Como un pequeño bebé
(Coro) Como un pequeño bebé...

Si me matan y me muero
Los pretendo complacer
Volveré desde la tumba
Y no será a comparecer
Seguro me iré de rumba
Con los reales, con la muna
Que me han hecho envilecer
(Coro) Envilecer... te han hecho envilecer...

Con la prestancia de un mago
O de un buen imitador
Agarro cualquier idea
Hablo con mi contador
Y lo dejo resolver
Si la verga deja rial
Se la cuento a mi mujer
Involucro a algunos panas
Y ya no hay nada que hacer
(Coro) No hay na' que hacer...

Con el peo de las tres erres
No me vais a convencer
Mis contactos en el norte
Lo van a facilitar
No importa cuanto ellos aporten
Siempre voy a necesitar
De billete como monte
Para poder controlar
Conciencias y voluntades
Y con eso gobernar
(Coro) Y con eso gobernar....

La consigna que he aplicado
De copiar, copiar, copiar
Ha dado sus resultados
Con esfuerzo singular
Y las tres erres que he usado
Son Robar, Remedar y Rebuznar

Lo de Robar no lo explico
No hace falta para ná
Con las fincas, con las cuentas
Extenderse es redundar

Remedar no se si entienden
Tiene que ver con imitar
Y no hay nada que este gobierno
Haya querido inventar
Lo copio por que lo copio
Así sea por no dejar
(Coro) Así sea por no dejar....

Rebuznar eso si es grave
Me ha costado cantidad
Tú no sabes cuanto esfuerzo
He tenido que efectuar
Para meter más la pata
Que ese señor Groucho Marx
El viejito ese de Barbas
Que ha escribido El Capital
(Coro) Que ha escribido El Capital...

Y si Chávez que es un monstruo
Cuando en Yare lo encerraron
Construyó su verborrea
Cuando me encuentre encanado
Yo aprenderé a hacer Sudokus
Y quien sabe, tal vez lea
(Coro) Sí tal vez lea....

Mis amigos de los medios
Ustedes comprenderán
No es con cantos de ballenas
Que las cosas cambiarán
Es con hombres con ideas
Como las de este servidor
Que el país anexionado
Al imperio explotador
Aprenderá a comer cable
Pero vivirá mejor
(Coro) Así vivirán mejor...

Para cerrar este rap
Lo importante es que me deis
La gran oportunidad
De poder interpretar
Junto con Ramos Allup
Un mensaje y que dejéis
Que la música la ponga
El Disk Jockey que queréis
Un nombre tan singular
Y tan querido en el Zulia
Como es el nombre de Nomela
El de Nomela Dj
(Coro) El de Nomela Dj...
El de Nomela Dj...

domingo, 22 de marzo de 2009

Párese a sufrir

(Favor leer este texto con acento portuñol)

¡Queridos hermanos!, les habla el Obispo Alberto Federico. Reciban todos ustedes los fraternos saludos y la bendición de nuestro señor: El Dinero.

Como Obispo de la Iglesia Universal Reaccionaria y Ultraderechista Párese a Sufrir, quiero hacer del conocimiento público, los esfuerzos que todos nuestros Pastores han venido realizando a lo largo de estos años para ofrecerles a ustedes el camino de la salvación y la verdad.

Día tras día, hemos llevado nuestro mensaje apocalíptico a través de interminables horas de transmisión radioeléctrica y a lo largo de kilómetros de escritura incendiaria y espeluznante. Pero no hemos podido vencer la labia de Lucifer.

Encienda la tele, sintonice alguno de nuestros canales, busque el programa de alguno de nuestros Pastores y… ¡Párese a Sufrir!. Salga de su casa, diríjase hacia la panadería de la esquina y, antes de tomarse el cafecito matutino, empuñe el periódico comenzando por la primera o por la última página y… ¡Párese a Sufrir!

Titulares perversos, noticias despiadadas, mentirillas blancas, cobas del tamaño del Empire State Building, y embustes que por su magnitud mandan derechito al psiquiatra víctimas de un gran complejo de inferioridad, a las Torres Petronas de Kuala Lumpur, no han podido convencer a las mentes incautas de nuestro pueblo que, en su afán por salir de abajo, se cobijan bajo las alas de Luzbel.

Antes de que los evangelizadores brasileños con el “Reverendo” Edir Macedo a la cabeza, comenzaran su negocio… digo, su “Cruzada Religiosa” (empresa que los ha llevado a convertirse, seguramente en contra de su voluntad, en magnates de un emporio internacional), ya nosotros aquí, en Venezuela, habíamos patentado la idea de crear una nueva presentación para distribuir el opio de los pueblos.
Nuestro negocio, está cubierto bajo El Manto Sagrado de la Impunidad.
Estamos concientes de la importancia que poseen los medios de comunicación en el dominio de la voluntad de las masas y por ello nos hemos hecho con el control de grandes cadenas de radio, de influyentes periódicos, de imprentas, editoriales, estudios de grabación y de las joyas de la corona que para nosotros representan las estaciones de televisión. Hemos pontificado acerca del desastre económico hacia el que conducen a la nación los populistas del gobierno, y no importa que no hayamos pegado una, que por pequeñeces como esas no vamos a parar de seguir.
Nuestros pastores, el Reverendo Miguel Rodríguez, los Hermanos Gerver Torres, Moisés Nain y Hugo Faría, todos ellos expertos en economía, nos han brindado recetas infalibles para acabar con los pobres… pero los muy malagradecidos no quieren entender que el camino para alcanzar el cielo comienza por pasar mucha hambre y trabajo.
Los obispos de nuestra iglesia, Teodoro Petkoff, Emeterio Gómez y Francisco Faraco, infalibles en sus apreciaciones, han recibido del pueblo el reconocimiento y el apoyo ganándose el mote bíblico de Profetas del Desastre, pero éste Régimen no los ha escuchado.
Los apóstoles de nuestra fe, Luís Giusti, Humberto Calderón Berti y Alberto Quirós Corradi, jamás se han equivocado en sus predicciones acerca del comportamiento del mercado petrolero y mucho menos han errado en los consejos sobre cómo hay que emplear los recursos que nos proporciona ese Aceite Milagroso que mana en nuestra tierra como del Huerto de Getsemaní.
Pero queridos hermanos, ¡El demonio, en realidad no tiene cuernos como hasta ahora las falsas religiones han divulgado, no!, ¡Belcebú tienen una verruga! Y si se la examinan con una lupa verán que tiene escrito –al lado del letrero de Made in China- el número de la bestia… ¡El 666!
En realidad, queridos hermanos, no deja de impresionar la capacidad y la astucia que tienen algunas personas de envolver a la gente, y éste falso profeta ha hecho que las personas pobres piensen que tienen derecho a salir de marginalidad.
Para realizar el culto y defender nuestra doctrina, abandonamos la idea de reunirnos en teatros quebrados y cines de mala muerte y, pasamos a mostrarnos ufanos en lugares abiertos, como en plazas o avenidas en donde con un poquito de la ayuda de nuestras cámaras de televisión, hemos llegado a pensar que de verdad somos la mayoría; hemos brincado y sudado al ritmo de bailoterapia, hasta lograr que las más gordas de nuestras seguidoras -con excepción de La Bicha- hayan rebajado ostensiblemente sus panzas y sus papadas.
Nos hemos burlado del sistema de justicia del país y hemos armado berrinches de carajito malcriado en los circuitos internacionales cada vez que nos ha dado la gana, hemos presentando ante el mundo la persecución, el maltrato y la exclusión de la cual son víctima nuestros mártires, pero no hemos podido quebrantar el espíritu de Pazuzu en su afán por hacer más democrática la distribución de los ingresos de la patria.
Nuestros adeptos siguen ciegamente y al pié de la letra nuestra doctrina. Y esto se les ha convertido en un asunto de fe. Su impacto en la industria de los mercados mediáticos y financieros es indiscutida y si bien no hemos podido demostrar que la gente con nosotros para de sufrir, es bien cierto que jamás para de pagar. En una economía basada en nuestros principios, tendrán que pagar por el agua precios que les harán pensar que la extraemos del mismísimo río Jordán. El pan que se coman llegará a costar más que el bendecido por Nuestro Señor en la última cena, y el valor de los terrenos les hará pensar que están adquiriendo lotes de Tierra Santa.
Sin embargo anoche Mefistófeles anunció al país su Paquete de Medidas Anticrisis y otra vez nos ha dejado en ridículo, mirando para San Felipe. Ha retado al poder del mercantilismo, ha hecho a un lado los sentimientos casi religiosos que hacia el dinero le hemos inculcado al hombre contemporáneo. Nada de medidas de shock, nada de devaluación, nada de despidos masivos, nada de escenarios lúgubres, nada de decrecimiento, nada de contracción en el gasto público, nada de desaceleración de la economía, ¡nada de nada!

¿Qué falta de seriedad es ésta carajo?. No hubo aumento de la gasolina, se dedicó a sincerar el presupuesto nacional en base a un barril de petróleo con precio de 40 dólares; se afincó en la eliminación de los gastos suntuarios, se atrevió a tocar los coroticos del pesebre y ordenó la reducción de sueldos de los altos funcionarios del gobierno, en fin una falta de seriedad total en los planteamientos económicos por parte de este régimen.

¡Así, de verdad, no se puede!, ¡O Chávez entiende que la economía es algo serio y que los intereses que tiene que defender son los intereses de los banqueros, de los latifundistas, de los usureros que son las personas que de verdad le dan de comer al pueblo, o desde el púlpito de nuestras iglesias le comenzamos a azuzar nuevamente a la gente!.
¡¿Con un gobierno así, quién puede parar de sufrir?!